Es un disco de tamaño similar a los disquetes de 3,5 pulgadas, donde podemos grabar unos 70 minutos de música.

Del mismo modo que el DCC, utiliza un sistema de compresión de datos que le permite ahorrar espacio a costa de una pequeña pérdida de calidad. En este caso, se llama ATRAC, siglas de Adaptative Transform Acoustic Coding - codificación acústica de transformación adaptativa)

Aunque Sony lo está promocionando de manera exhaustiva, fabricando incluso reproductores portátiles (tipo disc-man), hasta el momento no ha despegado, y parece difícil que lo haga, dado su elevado precio (unas 80.000 pts la grabadora)

Comparte con el DCC el alto precio de los discos vírgenes, cercano también a las 1.000 pts/hora.